AL FIN CRUZAMOS EL CHARCO PARA NUESTRO VIAJE MÁGICO A ORLANDO - DÍA 9

En el día de hoy nos levantamos algo más tarde. Os podéis imaginar que llegamos de la fiesta de Halloween en Magic Kingdom cerca de la 1 de la madrugada así que decidimos dormir hasta las 8. Nada más levantarnos cogemos hora para Test Track y evidentemente la cola virtual de Guardianes de la Galaxia está ya agotada para por la mañana, más adelante a las 2 ya intentaríamos cogerla para la tarde noche. 

De nuevo volvemos a coger el Skyliner para Epcot en vez de Hollywoood Studios.

Llegamos a Epcot sobre las 9 y media y lo primero que hacemos es montar en Ratatouille, una media de hora que no nos pareció excesiva así que a esperar. Exactamente igual que la de París pero como bien sabéis, muy divertida. 

La zona de Francia chulísima, muy elegante. Eh, espera, ¿no me digas que allí está Aurora? Venga, vamos, que no hay mucha gente, a hacernos fotos con ella. 

Ya os he contado que una de las cosas que más me gustó de WDW es el gran número de personajes que hay y que además con la app My Disney Experience puedes ir comprobando los horarios para no perderte ninguno, pero es que Epcot es una pasada por lo que respecta al número de personajes, hay muchísimos y podrías prácticamente estarte todo el día solo dedicado a hacerte fotos con ellos. 

Y si la zona de Francia me encantó, qué decir de la de Reino Unido, ay, qué emoción estar paseando de nuevo por mi amado Londres. Y más si en ese paseo te encuentras con Alicia prácticamente sola.

Después de pasar por la zona de Canadá, giramos hacia World Celebration para ir a conocer a Joy y a Vanellope. Muy divertidas las dos. Un placer conocerlas. 

Y ya que estábamos en la zona, nada mejor que pasar a ver la un corto de Pixar y montar en Journey into Imagination with Figment. 

Con tranquilidad volvimos a World Showcase porque teníamos hora en el Biergarten (de buffet) a las 12:30. Por el camino fuimos haciendo algunas fotos pero sin centrarnos en todo este land que a pesar de no tener muchas atracciones, se convirtió en una de mis zonas favoritas no solo de Epcot sino de todo WDW. 

Nos gustó bastante el buffet del restaurante. Mucha variedad y el Schnitzel riquísimo al igual que el Apple Strudel. De los lugares en los que comimos mejor. Mientras comimos, cogimos la cola virtual para Guardianes de la Galaxia. 

Es un sitio en el que repetiría sin dudarlo por la relación calidad precio. Además el interior del restaurante es muy bonito y hay música en directo. 

Volvimos sobre nuestros pasos para montar en Soarin y en Living the Land. La prmera nos decepcionó un poco y la segunda pasable aunque a los chicos les gustó mucho la zona de los animales acuáticos. 

Hora ya de nuestro Genie+, Test Track, divertidísima, nos lo pasamos en grande, parece suave pero la verdad es que pega un buen acelerón. De paso también montamos en Mission: Space, los chicos en la fuerte, yo en la débil aunque el día que repetimos en Epcot, me lancé a montar con ellos. También muy divertida pero si eres propenso a marearte, puede que salgas un poco afectado, de hecho  los chicos tuvieron que esperar a que limpiaran la nave porque una persona había motivado dentro. 

De nuevo cogimos Genie+ para Frozen, y de paso nos acercamos a saludar a Elsa y a Anna, muy guapas y simpáticas las dos aunque una servidora siempre será fan de Anna. Hicimos tiempo tomándonos algo justo al lado de la atracción porque en Epcot no paras de andar de un extremo a otro y al ser el parque con menos sombras, hace muchísimo calor, más que de costumbre. 

Y llegó uno de los momento estrella del viaje: Guardianes de la Galaxia. Espectacular, de las mejores atracciones en las que he montado. Eso sí, os aconsejo madrugar y coger la cola virtual para las primeras horas porque así no tendréis que esperar, nosotros estuvimos más de una hora esperando cola y sin embargo el día que volvimos a Epcot, solo estuvimos cinco escasos minutos. 

Poco nos quedaba ya por hacer en el día de hoy por Epcot. Así que cena rápida en Connections Eatery (no muy recomendable) y a ver el espectáculo de Harmonius. Como ya llegamos un poco tarde, nos costó encontrar un lugar óptimo para verlo, aún así disfrutamos muchísimo y a mí, por muchos detractores que tenga, me gustó bastante. 

Salir de Epcot después del espectáculo de Harmonius tuvo terribles consecuencias para nuestros cansados pies y cuerpos. Más de una hora de espera para poder coger el Skyliner pero nada que objetar con respecto a la organización, los CM enseguida controlando la cola y que nadie se colara. Un 10 en ese aspecto para WDW. A dormir que nos lo hemos merecido.