Marchando una de espetos - Día 1

Un momento de descanso entre tanta locura con la vuelta a la rutina nos permite empezar con la review del viaje que hicimos en Agosto pasado a Andalucía, y más concretamente a Málaga con estancia entre Fuengirola y Frigiliana. 

Un viaje muy necesitado después del confinamiento domiciliario y con altas medidas de seguridad debido a la Covid-19. Cuesta hoy echar la mirada atrás y ver que por varias razones que lógicamente no nos toca debatir aquí, hemos vuelto al comienzo de la pesadilla como si todos los meses que hemos pasado no nos hubieran enseñado nada. 

En fin, que viendo que los números de contagios subían (ya podríamos volver a esos números de Agosto) decidimos adelantar un día nuestro viaje, así que nada más comer, nos pusimos en marcha hacia nuestra primera parada: Osuna en la provincia de Sevilla. 

Éramos conscientes de que no íbamos a poder disfrutar de la localidad a fondo, como nos gusta en Los Viajes de Dora, pero que al menos podríamos dar un paseo nocturno por Osuna y tener claro que en un futuro, esperemos no muy lejano, tendremos que volver porque nos dejó muy buen sabor de boca. 

Llegamos al hotel que habíamos reservado del que ya os hemos dejado una reseña en el blog y nos acercamos al centro de la localidad en coche aparcando justo frente a la Universidad de Osuna donde hay una zona gratuita para dejar el coche. 

Así mismo, en la plaza se encuentra también la Colegiata de Osuna que evidentemente estaba ya cerrada pero eso no nos impidió disfrutar de unas preciosas vistas de la ciudad. Decidimos acercarnos a la Plaza Mayor para encontrar un sitio donde poder cenar. Vimos de bajada la fachada del Monasterio de la Encarnación. 

En la Plaza Mayor encontramos un restaurante de comida rápida que servían hamburguesas de todo tipo, bastante ricas y sobre todo artesanales, así que no lo pensamos mucho y nos sentamos a cenar. 

Nada más cenar, nos dispusimos a dar una paseo nocturno por Osuna. A pesar de estar en pleno Agosto, no nos dio la sensación de pasar mucho calor, gracias también al helado que nos tomamos para refrescar el cuerpo. 

Volvimos al coche para irnos a dormir al hotel puesto que al día siguiente sabíamos que nos iba a tocar un día completo por Ronda. En nuestra retina, la imagen de la Universidad de Osuna de noche. Sin duda volveremos, aunque no en Agosto, para no tentar a las altas temperaturas.