Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en El Tiemblo

Qué mejor que un sábado más o menos de transición, a la espera de las ansiadas vacaciones en Irlanda, para conocer alguna de las iglesias que gracias a la iniciativa de Castilla y León "Abrimos en Verano" se pueden visitar del 20 de julio al 31 de agosto. Así que buscando algunas que estuvieran relativamente cerca de casa, nos acercamos a la localidad de El Tiemblo en Ávila. 

Nada más aparcar, un paseo corto, que el calor es muy fuerte y llegamos a la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. 

El templo tiene cabecera única orientada hacia el Este, tres naves, puertas al norte y al sur y torre a los pies. La cabecera y la nave del crucero ofrecen paramentos lisos y contrafuertes en todos los ángulos; rematados, algunos, con adornos abalaustrados. 

En el interior, la cabecera es poligonal y la bóveda de crucería con treceletes. 

El retablo mayor de forma semicircular, dorado, está cubierto por abundantes adornos florales. Pertenece al primer tercio de siglo XVIII. La imagen de la titular, Nuestra Señora de la Asunción, es una interpretación moderna de la Asunciones barrocas. Remata el retablo con un lienzo de San Francisco de Paula arrodillado del siglo XVII o XVIII. 

     

Los retablos laterales del crucero están sin policromar; uno dedicado a la Pasión con bajorrelieves de figuras llevando signos de la Pasión y rematado con un Cristo con la cruz a cuestas.. La hornacina central acoge a la Virgen Dolorosa de vestir que sale en procesión los días de pasión. El retablo es del segundo tercio del siglo XVIII. 

El otro retablo es rico en hojarasca barroca y más o menos de la misma fecha que el anterior. En el centro tiene un lienzo de la Virgen con el Niño, copia del siglo XVII o XVIII de la Virgen del Populo. Remata con un Niño Jesús de escayola moderno que se utilizaba en la Santa Infancia. 

En la nave de la izquierda también podemos ver un Nazareno con la cruz a cuestas de escayola y un Cristo yacente en su urna del mismo material. Junto a ellos está el Ecce Homo con las manos cruzadas sobre el pecho y las piernas ligeramente abiertas. 

A continuación un retablo policromado en azul y rojo veteado y dorada las guirnaldas, racimos, acantos y festones; en su hornacina central contiene una imagen de la Inmaculada del siglo XVII, de la escuela de Gregorio Fernández. Una lámina de San José se sitúa en el ático que culmina con un frontón triangular. 

Siguiendo la misma nave destaca a continuación un Cristo entrando en Jerusalén por su monumentalidad y por ser una talla moderna del escultor de la localidad Nicomedes Díaz Piquero. 

Un cuadro en lienzo del Cristo de Burgos, restaurado, cubierto con larga enagua que le llega por debajo de las rodillas, los enormes clavos y el huevo a sus pies es símbolo de la continuidad de la vida. Se le conoció por el Cristo del Miserere. Es del siglo XVII. 

En el Baptisterio, la pila de piedra cóncava con cenefa de picos en el borde responde a un tipo románico. 

En la nave derecha encontramos otro retablo con imágenes de la Virgen del Carmen en el centro y de San Antonio, patrono del pueblo, ambas de escayola. Al otro lado está Santa Teresa en talla de madera de largo cuello y movido hábito con su pluma y su libro. 

Debajo de la tribuna hay una Virgen con el Niño en talla de madera del siglo XV. Al lado, una imagen de vestir moderna de la Virgen. 

En la tribuna, el órgano y su fuelle, en desuso por estar estropeado, es de 1893.

De nuevo, dar las gracias a Castilla y León por permitirnos ir descubriendo nuevos monumentos de la comunidad.