Viaje a Tembleque

Un día del Puente de Mayo, de esos días que no sabes qué hacer porque no tienes ningún viaje planeado, decidimos acercarnos por la tarde a la localidad toledana de Tembleque, sabiendo que no íbamos a poder visitar el interior de su iglesia, pero al menos podríamos disfrutar de la belleza de su impresionante Plaza Mayor. 

Aparcamos cerca de la Ermita de Loreto y desde allí tomamos la calle de Las Cruces para llegar a la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. 

La iglesia es del siglo XVI y fue ampliada en el siglo XVII, de estilo de transición del gótico al renacimiento, con planta de cruz latina de una sola nave y bóveda de crucería de estilo gótico. La capilla de la Virgen del Rosario y la de Nuestro Padre Jesús Nazareno se encuentras adosadas al templo. 

Por desgracia estaba cerrada. Suponemos que, como suele ser costumbre en España, solo abriría en horario de culto. 

     

Continuamos por la calle de la Iglesia y la calle del Convento para llegar al Palacio Torres, no sin antes saludar a Don Quijote. 

El Palacio de las Torres es un edificio del siglo XVIII, de estilo barroco. Mandado construir por D. Antonio Fernández Alejo. Presenta planta cuadrada con patio central. Destaca por su bella portada profusamente decorada con diversos motivos ornamentales. Declarada de Interés Histórico Artístico desde 1979. Por desgracia por dentro se encuentra totalmente abandonado. 

Seguimos por la misma calle hasta la Ermita de la Purísima y el Rollo. La ermita pertenece a la primera mitad del siglo XVII. De una sola nave. En su jardín está emplazado el Rollo Jurisdiccional del siglo XVI, que exento de carácter de castigo, servía como elemento emblemático de la jurisdicción de villa de un municipio. 

De nuevo en la iglesia, nos dirigimos sin más dilación a la Plaza Mayor, sin duda el lugar más conocido y representativo de la localidad. Es una edificación de caracteres típicamente manchegos con raíces taurinas cuya estructura responde a una doble función: urbanística y plaza de toros. De planta rectangular con pórtico de columnas de granito y corredores en la planta superior, con soportes y ornamentación realizados en madera siguiendo las orientaciones de las construcciones de uso popular del siglo XVII. Declarada de Interés Histórico Artístico en el año 1973.

En la misma se encuentra el Ayuntamiento que fue construido a mediados del siglo XVII, hacia 1654.

Para terminar con el paseo por Tembleque seguimos por toda la calle Gracia para llegar al edificio que alberga la Biblioteca Municipal que es la ermita de la Veracruz con planta octogonal de extrema sobriedad y pureza arquitectónica. 

Y la Casa de Postas o Parador de afuera, edificio del siglo XVIII que presenta planta rectangular y tiene una estructura en tres cuerpos y dos pisos de eje central y cuatro a los laterales. 

Casi saliéndonos de Tembleque, y por último, llegamos a la Ermita de San Antón también del siglo XVIII de armónicas proporciones y extremada sencillez. 

Vuelta al coche, y despedida de nuevo de Don Quijote. Una pena no encontrarnos ningún edificio abierto pero al menos salimos un poco de la rutina y descubrimos una de las plazas mayores más importantes de España.