Visita a Santo Domingo de la Calzada

Santo Domingo de la Calzada es una ciudad, ya desde su nombre y su fundación, íntimamente ligada al Camino de Santiago. La riqueza cultural y el carácter calceatense resultan de la herencia de un pasado medieval de leyendas y tradiciones y del paso de millones de personas de todas las nacionalidades que atraviesan estos campos de camino a Compostela. 

Historia

En el siglo IX el eremita Domingo se retiró al río Oja para vivir apartado y ayudar a los peregrinos que iban a Compostela. Domingo creó un pequeño pueblo alrededor de una ermita, un Puente y un albergue de Peregrinos, hoy Parador Nacional de Turismo. A su muerte, alrededor de su tumba, hacia 1120, se empezaron a asentar edificaciones en torno al sepulcro, surgiendo un burgo que en 1232 sería elevado a la categoría de cabeza de diócesis episcopal, pasando en 1250 de manos del abad a la jurisdicción del rey.

Alfonso VIII le concedió los fueros en 1187 y 1207 para potenciar su crecimiento. Durante los siglos XIV y XV se construye la muralla. En el XVIII se produce una remodelación en la ciudad con el traslado del centro de la plaza del Santo a la Plaza Mayor con el edificio del Corregimiento y el Ayuntamiento. En la plaza del Santo se levanta la torre exenta en el espacio que ocupaba hasta entonces la cárcel, ahora trasladada al edificio del Corregimiento. En el siglo XIX Santo Domingo de la Calzada se convierte, con la creación de la provincia de Logroño, en cabecera de comarca y partido judicial. En 1973, su casco antiguo fue declarado Conjunto de Interés Histórico Artístico. 

Con todo este pasado histórico, y teniendo en cuenta que la catedral que queríamos sin duda visitar abría el domingo por la tarde, estaba claro que teníamos que pasar unas horas paseando por esta villa. Así que, después de aparcar al lado de la Plaza de San Francisco, en un parking gratuito, empezamos a recorrer la localidad. 

Tomamos la Calle Pinar y todo recto encontramos los primeros palacios.

Enseguida giramos hacia la calle Mayor y seguimos viendo distintos palacios con sus blasones como la Casa de los Ocio, o la casa Trastámara, actual Biblioteca Municipal. 

Hasta llegar a la Plaza del Santo, en donde como antes hemos dicho, se encuentra el actual Parador de Turismo, antiguo Hospital de Peregrinos. La fachada tiene un arco apuntado sobre el que descansa una hornacina coronada por frontón, que alberga una imagen del santo. 

En esta misma plaza se encuentra la Ermita de la Virgen de la Plaza. 

La torre exenta de la Catedral, que es una torre barroca con 70 metros de altura. Fue levantada entre 1762 y 1767.

Y por supuesto, la Catedral con su impresionante fachada principal, aunque el acceso se haga por una calle circundante justo girando a mano izquierda. 

En la entrada que dedicaremos a la Catedral, ya os dejaremos una gran cantidad de fotos y una explicación detallada de la misma. A destacar en su interior la tumba del santo y el gallinero con el gallo y la gallina vivos, relacionados con la famosa leyenda sobre el milagro del gallo y la gallina, que ya os contaremos. 

Seguimos caminando en dirección a la Plaza Mayor en donde se encuentra el Ayuntamiento, la Alhóndiga y la Antigua Sede Oficial del Corregimiento de Rioja. 

Y volviendo a la calle Mayor llegamos a la Abadía Cisterciense que por desgracia encontramos cerrada, aunque en realidad no sabemos muy bien si tendrá horario de visitas o no, ya que hoy en día es un establecimiento hotelero. 

Volvemos prácticamente sobre nuestros pasos, y seguimos descubriendo más palacios con sus blasones, hasta llegar de nuevo a donde habíamos dejado el coche aparcado.

Antes de dar por finalizada nuestra visita a Santo Domingo de la Calzada, nos acercamos al Convento de San Francisco. De estilo herreriano, actualmente parte de él está destinado a Taller diocesano de restauración de obras de arte, otra parte al Parador de Turismo y una última a residencia de personas mayores. 

Hora ya de volver a descansar a la casa rural. Un día muy completo, como siempre.