Sin duda Sevilla tiene un color especial - Día 1

Os vamos a ir mostrando gran parte de las imágenes de nuestro viaje a Sevilla en Diciembre 2013, donde además de disfrutar de los monumentos de una de las ciudades más bonitas de España, lo hicimos en una de las épocas más mágicas del año: Navidad.

Para ello estuvimos alojados en el Gran Hotel Sólucar, situado en Sanlúcar la Mayor, a unos 25 kilómetros de la capital hispalense.

El día primero de nuestro viaje, el 26 de diciembre, antes de empezar a descubrir la capital, nos acercamos al Monasterio de San Isidoro del Campo y al yacimiento arqueológico de Itálica.

Y así, después de comer en el Centro Comercial MetroMar situado en Mairena del Aljarafe, en donde dejábamos el coche aparcado para tomar el metro que nos llevara el mismísimo centro de la ciudad.

En metro llegamos hasta la Puerta de Jerez y desde allí, tomando la amplia Avenida de la Constitución, a la impresionante Catedral de Sevilla.

En esta ocasión, no entramos en su interior, puesto que cerraban en breve, así que decidimos recorrerla por su exterior, ya que el día era soleado y en previsión a que lloviera en otra ocasión. Os dejo algunas imágenes, y ya más adelante me centraré en los detalles.

      

Igualmente vimos la entrada a los Reales Alcázares y el Palacio Arzobispal, residencia del Prelado de Sevilla.

      

En donde sí entramos fue en el Archivo General de Indias.

Archivo General de Indias

Antigua Casa Lonja de Mercaderes, comenzada a construir en 1584. Es uno de los ejemplos más representativos del estilo manierista en Sevilla, de clara influencia herreriana. En tiempos de Carlos III, este edificio se adaptó para Archivo de Indias, el más importante archivo americanista del mundo, donde se guarda toda la documentación y administración del Nuevo Mundo durante el periodo de colonización española.

      

      

Abierto de Lunes a Sábado de 9:30 a 17:00 y los domingos de 10:00 a 14:00. Gratuito

Hospital de la Santa Caridad

En un encaje de bolillos para poder visitar el mayor número de monumentos en estas vacaciones, nos acercamos al Hospital de la Santa Caridad.

En 1662 el aristócrata sevillano Miguel de Mañara ingresó en la Hermandad de la Santa Caridad de la ciudad planteó la creación de un hospital para atender a pobres y vagabundos. Los miembros de la hermandad consideraron una participación menor en el proyecto con la creación de un hospicio donde pudieran pasar la noche los vagabundos de la ciudad. El hospicio existió durante ocho años, tras los cuales la Hermandad tomó la decisión de ampliarlo y convertirlo en un hospital.

Destaca el patio de acceso, dividido en dos partes separadas por un pasaje volado sobre columnas. El patio se encuentra flanqueado por tres de sus lados por columnas toscanas rematadas con arcos de medio punto y decorado con siete paneles de azulejos de 1700, de origen holandés, que representan escenas bíblicas que en un principio pertenecieron al Convento de los Descalzos de Cádiz. En cada uno de los espacios del patio se levanta una fuente de mármol con grupos escultóricos de la Fe y la Caridad, respectivamente, realizadas en Génova en 1682.

       

Iglesia de la Caridad

Iglesia de la Caridad. En 1644, por ruina de la antigua capilla, se decide la construcción de una nueva iglesia según planos de Pedro Sánchez Falconete. La Iglesia es de una sola nave cubierta con bóveda de cañón y una pequeña cúpula en el antipresbiterio. Los muros se articulan con pilastrones y pilastras corintias que sostienen una cornisa de saliente alero. A los pies de la iglesia se encuentra el coro, elevado sobre una arcada triple. El templo se encuentra decorado con yeserías que en su nave central presenta formas abstractas.

       

Horario: De lunes a sábado de 9:30 a 13:00 y de 15:30 a 19:30; los domingos de 9:00 a 12:30

Precio: 5€ (incluye audio guía)

La Torre del Oro y el Barrio de Triana

Aún nos quedaba tiempo para seguir paseando por esta bellísima ciudad.

Así que desde el Hospital de la Caridad nos acercamos al Río Guadalquivir para enamorarnos de su paseo fluvial y de sus puentes.

Y empezamos por la Torre del Oro. Su construcción se remonta al siglo XIII, formando parte del sistema defensivo almohade. Del por qué de su nombre no se tiene total certeza. Algunos recurren a un antiguo revestimiento en azulejos con reflejo metálico, otros a su función como depósito de los metales preciosos traídos de América.

En su interior de la Torre del Oro se aloja el Museo Naval que alberga importante documentación gráfica y escrita sobre la historia náutica de la ciudad.

No accedimos a su interior puesto que el tiempo apremiaba. De todas formas os dejamos los horarios y los precios por si os interesa.

Horario: De lunes a viernes de 9:30 a 18:45 y los sábados y domingos de 10:30 a 18:45. Cerrado los días festivos.

Precio: 3€ adultos; 1,50€ de 6 a 14 años, estudiantes y jubilados y gratis los menores de 6 años y lunes.

       

Dejando atrás el Puente de San Telmo, llegamos hasta la Plaza de Toros de la Real Maestranza, que alberga el museo taurino, pero que ya se encontraba cerrada, y además no somos muy fans de los toros. Eso sí, la Plaza nos pareció impresionante, además a esas horas el sol empezaba a darle a la plaza un precioso color propio del anochecer.

En la otra orilla, todo el barrio de Triana.

Horario del Museo Taurino: Todos los días de 9:30 y 19:00. Consultar días de corrida.

Precio: 7€. Estudiantes y jubilados: 4€. De 7 a 11 años: 3€. Gratis lunes de 15:00 a 19:00.

Cruzando por el Puente de Triana, nos adentramos en el famoso barrio del mismo nombre.

      

En primer lugar nos dirigimos a la Parroquia de Nuestra Señora de la O, en donde se venera el Nazareno de la O.

       

Bajando por la calle Pureza nos encontramos con la Capilla de los Marineros donde recibe culto la Esperanza de Triana, ante cuya imagen se postran diariamente cientos de trianeros.

       

Un poco más adelante se encuentra la Real Parroquia de Santa Ana. Esta parroquia fue la primera iglesia construida de nueva planta, tras la reconquista de Sevilla por Fernando III el Santo en 1248. En realidad, se trata de una fundación de su hijo, Alfonso X el Sabio, quien la consagró a la Abuela de Cristo por haberle sanado de una enfermedad de los ojos.

      

       

Anochece por Sevilla y al encanto de la ciudad se le unen las calles iluminadas con luces de Navidad.

E impresionante la Torre del Oro ya iluminada, así como el paseo por la ribera del Guadalquivir.

Hora de descansar que para haber sido el primer día, lo hemos aprovechado hasta el final.